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31 de mayo de 2011

Provocaciones alrededor del tema del racismo

Muchas personas estamos de acuerdo alrededor de la idea general de que el racismo es contrarrevolución. Incluso en una sociedad que pretenda alcanzar el bienestar general bajo otros principios distintos a los de la cubana, el racismo sería igualmente una lacra a combatir. Al racismo, debemos asestarle golpes sin cesar mientras exista, denunciar, condenar y azotar inclementes cada una de sus manifestaciones, hasta que quede definitiva e irrevocablemente extirpado.
He estado leyendo en estos días la compilación de ensayos Raza y racismo (editorial Caminos, 2009) y alrededor de uno de sus trabajos me surgieron algunas ideas provocativas.

Entre las motivaciones de la autora destaca el hecho de haber comprobado en múltiples escenarios mediáticos, particularmente la televisión, la marginación de las personas negras. También se hacen notar todas las maneras peyorativas de las personas de tratar y referirse a los cabellos no lacios. La autora aporta varias vivencias a manera de experiencias personales manifestando, entre otras facetas, cómo a ella la marginaron de un grupo de modelaje con un criterio que no se aplicaba a otras muchachas blancas. Tengo que decir que la manera de escribir de esta autora, de la que ya había encontrado varias muestras, tiene una perturbadora sensibilidad que convierte sus mensajes en algo difícil de ignorar.
Aquí se me ocurrió una de esas ideas provocativas que uno piensa a veces algo a la ligera y las echa a rodar, para que se discutan por lo que puedan valer. Todo grupo de modelaje que actúe en estos tiempos y se rija por los estándares (marcados por el racismo blanco) contemporáneos, va a tener ese mismo problema. Entonces, qué tal si un grupo de creadores se pone de acuerdo y hace un conjunto dedicado a este arte, compuesto de manera significativamente mayoritaria por personas negras.
En realidad estoy hablando sin muchos fundamentos. No tengo la menor idea de si formar un grupo de estos es más fácil o más difícil que una orquesta de salsa o un equipo de béisbol para la Cocolimpíada. Pero si la cosa tiene algún sentido, se debe poder hallar, si se busca con la mente abierta, personas de la raza negra que no dejen nada que desear en cuanto a hermosura del cuerpo y la mente. Individuos dispuestos a mostrar con orgullo la naturaleza que ayer fue africana, y hoy también es absoluta y legítimamente cubana. Diseñadores habrá que pongan sobre esos hombros las maravillas de sus creaciones. Las actividades sociales, recreativas y culturales se honrarán de recibir a ese conjunto. Las instituciones sociales y políticas –UJC, sindicatos, organizaciones estudiantiles– tendrán valiosas oportunidades de conjugar recreación y compromiso social. El público también tendrá la oportunidad, por una parte, de asimilar el concepto de reivindicación de esos otros sentidos de la belleza y, por otra parte, de vitorear a los y las nuevas símbolos de lo que se considerará un éxito; ídolos que ya no exigirán, para muchos, el reniegue de su propio ser.
Si en el mundo del modelaje hay un poco o un mucho de frivolidad no es el punto que nos interese ahora. En todo caso, la actividad de este conjunto implicará una profundidad y un compromiso sustancial con la superación de la lacra del racismo. Ya muchos grupos de personas han superado la situación del lamento pasivo, y desarrollan valiosas y disímiles iniciativas en esta dirección, siendo la Cofradía de la Negritud la primera que me viene a la mente. Puestos a andar por ese camino, gobierno y sociedad civil encontrarán muchas otras maneras culturales y educativas de dinamitar los conceptos discriminatorios que persisten en nuestra sociedad con más fuerza y maldad que el marabú. Todos los interesados podremos poner nuestro granito de arena en cada una de esas iniciativas.

27 de mayo de 2011

Contra las injusticias, en cualquier parte del mundo

 Unas noticias más o menos recientes nos movieron las fibras sensibles y me dio por escribir esto. La cosa empezó cuando el 26 de abril pasado, el Tercer Circuito de Apelaciones de los EEUU reafirmó que la sentencia de muerte para Mumua Abu Jamal era improcedente.
 
En el extenso y controvertido proceso judicial, aplicado al ex-pantera negra por el asesinato del policía Daniel Faulkner, se han producido, atendiendo a las informaciones que uno puede conseguir, tantas contradicciones, irregularidades e incertidumbres que parece monstruoso que se mantenga al célebre condenado en el corredor de la muerte. El sentimiento de justicia de la sociedad y de los seres queridos del fallecido no se pueden satisfacer con una ciega venganza, que puede fácilmente errar su objetivo cegada por el odio. Ensañándose con la persona equivocada, lo único que se logra es que un verdadero asesino viva tranquilamente en su casa el resto de sus días, y que los traumas y conflictos de la discriminación racial se enquisten en una atribulada sociedad.
 
Mumia, como es sabido, se ha convertido en un ícono universal de todos los que consideran su inocencia y admiran su resistencia y capacidad de manter desde su celda una actividad intelectual y política sobresaliente. La sociedad estadounidense, que ha sabido dar muestras de su capacidad para superar -paulatinamente- máculas que la han acosado históricamente, tiene en él una posibilidad más de recapacitar qué tipo de futuro desea para sus hijos.
 
Particularmente para los cubanos, el sistema judicial-penitenciario estadounidense mantiene otro caso muy sensible. En el caso conocido como el de "Los cinco", los agentes de la seguridad del Estado cubano capturados en 1998 cumplen prolongadas sentencias. En este particular, también se señalan montones de incongruencias, como el de no concedérseles el derecho a juicio fuera del estado de Florida, tan poco propenso a la imparcialidad en un caso así; que el gobierno federal estadounidense parece haber pagado a periodistas para que atacaran a los acusados, y otros detalles que han sido divulgados hasta el agotamiento por los medios oficiales de Cuba. Acá, a uno le conmueve pensar que estos compatriotas suministraban información sobre organizaciones conocidas por montar acciones violentas contra blancos civiles en nuestro archipiélago, definibles como terroristas en cualquier parte del mundo, y suspiramos porque ocurran los cambios de política que sean necesarios para negociar con sensibilidad, discreción y mejor éxito que lo que hasta ahora han tenido las iniciativas dirigidas a la liberación de Antonio, Fernando, René, Ramón y Gerardo.
 
Otra información reciente da cuenta del asesinato en Brasil de un líder comunitario y ecologista, José Claudio Ribero Da Silva y su esposa, María Do Espíritu Santo Da Silva. La pareja era reconocida por la defensa que hacía de los pequeños campesinos, y por las denuncias contra los monopolios expoliadores de la riqueza natural brasileña. Ambos estaban concientes de que su militancia les podía costar la vida en cualquier momento, y aún así persistían en defender la dignidad y derechos de sus compañeros.
 
Es conocida la falta de escrúpulos de los grandes comerciantes madereros y mineros de la Amazonia, su inquebrantable voluntadde aplastar todo lo que se atraviese en el camino de su ambición desmedida. De esta manera, no vacilan en aplicar las medidas más draconianas contra las comunidades humildes afectadas por sus actividades, incluyendo violaciones, asesinatos, desplazamientos forzados y cualesquiera vejámenes que consideren necesarios para aplastar la resistencia. Los conceptos de respeto a la sagrada vida humana son totalmente ajenos a estos mercachifles, no digamos ya el sentido ecológico, con lo que la protección de la Amazonia y sus pobladores necesita de algo más que de las tímidas reformas sociales de los gobiernos del PT -una revolución verdadera, popular y democrática, sería nuestra sugerencia.
 
Finalmente y por nuestros lares, al pintor cubano Pedro Pablo Oliva parecen haberlo declarado "villano público" en ciertos círculos oficiales, desde que un delegado de la Asamblea Provincial de Pinar del Río lo denunciara por tener ciertas actitudes alejadas de lo políticamente correcto. Del cruze de declaraciones, he sacado en claro que lo peor que hizo el artista -Premio Nacional de Artes Plásticas por un buen número de méritos y aportes a su nación- fue aceptar un código que iba contra sus principios de escoger libremente sus amigos, temas de conversación y opiniones políticas, y que este código le pasa la cuenta ahora que se manifestó la inevitable contradicción. A la casa taller que realizaba también una valiosa obra, parece que las autoridades le pusieron la cosa tan difícil que sus trabajadores decidieron cerrarla hasta la llegada de mejores tiempos. Qué tristeza, ver a alguien grande, y una obra así, atacados y mancillados por canijos y burócratas. Quien pierde más: naturalmente, los que antes recibían los frutos de la labor artística y pedagógica, esto es, el pueblo, los jóvenes aprendices; también sufre considerablemente la ya de por sí asustadiza capacidad de hablar con sinceridad y expresar lo que se piensa.
 
En fin, que ninguna de estas historias se ha acabado. En todas ellas hay oportunidad todavía para que se haga aunque sea un poquito de justicia, el poquito que quede después de tanto entuerto.
 
Tags: Mumia Abu Jamal, José Claudio Ribero Da Silva, María Do Espíritu Santo Da Silva, activistas ecologistas amazonia asesinato, cinco cubanos antiterroristas prisioneros, Pedro Pablo Oliva, contra injusticia

23 de mayo de 2011

Días de excursión

Hace un par de semanas, habíamos llevado a Rogelito a la costa de nuestro municipio, Playa, en La Habana. El plan era ir al Círculo Social del que mi padre es socio, pero el Funcionariato tiene el criterio de que el verano empieza el 3 de junio, así que la población llana que no tenga reservaciones gestionadas vía su burocracia, solo puede acceder a los CS a partir de esa fecha. Entonces, rechazados en la puerta del CS Otto Parellada  (¿o era el José Luis Tassende?, ahora no recuerdo) derivamos al litoral inmediato, allá entre estos CS y el Fontán, donde el mar hace una ensenadita de bajísima profundidad, el diente de perro está encendido, y algún artista puso una escultura consistente en una cola de sirena que se zambulle.
 
Hay que entender también a estos funcionarios de medio palo. No tienen las capacidades de sus superiores, de mandarse para Varadero u otros balnearios a su antojo, así que con algo tienen que consolarse. De todos modos Rogelito, felizmente ajeno todavía a las preocupaciones cívicas y metatrancosas, disfrutó muchísimo su baño, tanto, que nos embullamos para repetir el fin de semana siguiente, pero esta vez con una excursión más ambiciosa.
 
De esta manera, el sábado siguiente sacamos el carro de la familia, ese que costó tantas tribulaciones que se contarán un día como algo inverosímil. Echamos para alante entre todos un mes de salario para el combustible y nos dio, no para muchos litros de gasolina, pero sí para los necesarios para el paseo. El plan era ir a Santa María, lo suficientemente grande como para permanecer democráticamente abierta a todos, todo el año, y luego a casa de unos parientes en Jaruco. Lo de democráticamente es un casi casi, porque por las cercanías de los mejores parajes de esta playa hace décadas que no pasa transporte público, desde que el deterioro del conocido como Puente de Madera provocó el desvío de los ómnibus y demás tráfico pesado que antes podía entrar por el sector del hotel Marazul-Boca Ciega.
 
En Guanabo, según el plan, los excursionistas nos dividimos entre los que tomaron de inmediato la guagua para el pueblo de los parientes, y los que retrocederíamos unos centenares de metros para la playa. Pero la mala suerte quiso que el buen Lada se plantara allí y no arrancara para atrás ni para alante. Frustración y decepciones mediante, nos tocó también una parte buena que se puede ver bastante por acá, en el sentido de que los conocedores de mecánica y electricidad automotriz nos prestaron la tan necesitada ayuda de manera desinteresada. La playa se quedó para el mes que viene, pero al menos pudimos seguir para completar la visita.
 
Estos familiares son gente cálida y muy hospitalaria. Allá siempre la pasamos bien. La comida es exquisita.
 
La carretera, tan mala que a veces se prefiere salirse por los costados que enfrentar las furnias del camino. A ambos lados del camino, extensiones antaño de marabú, hoy con otro aspecto luego del Decreto Ley 259, ese que las concedió a personas interesadas en hacerlas producir. Nos quedó la duda de si los vecinos del pueblo de Campo Florido lograron quedarse dentro de La Habana, o si fueron expulsados contra su voluntad hacia el mucho más humilde Mayabeque. Mi padre, consecuente, acredita a la Revolución por haber llevado el teléfono a la comunidad a donde nos dirigimos. Yo medito que estamos a la cola de América Latina en el tema de las telecomunicaciones, pero estamos de paseo.
 
De regreso, Rogelito dormido en las piernas de su abuela. El cansancio relajado de todos. Mangos, plátanos y  puré de tomate en el maletero -adquiridos legítimamente a los campesinos, eh. Ya en la ciudad, en un margen de la Vía Blanca, llegando a la calenturienta Ciudad Deportiva, me llama la atención un pulcro cartel donde todavía se coloca a la Batalla de Ideas como uno de los cinco pilares del trabajo Político Ideológico, cuando a estas alturas del cuento parece más factible encontrarle cinco patas al gato.
 
Esa noche analizamos el hecho de que el bodeguero no le quiso pesar los panes a mi padre, que los apreciaba en falta. No te va a apoyar a tí en contra de su gremio, que conste. Hay una clara conciencia de clase ahí, solo que no la que nos gustaría a los demás.
 
En fin, a ahorrar para ver si en junio, nos vamos de nuevo a la playa y logramos la felicidad completa, sin sobresaltos regulatorios o mecánicos.
 
TAGS: excursión, Cuba costumbrista, familia, turismo nacional, solidaridad entre choferes

14 de mayo de 2011

Con el alma en cueros

A una amistad nuestra, ciertos funcionarios lo trataron como a un tunante porque, le dijeron, tiene manifestaciones impropias -ese es mi eufemismo, no es necesario profundizar. Es un amigo de los que tiene una intensa actividad intelectual, filosofa y comparte con nosotros sus ideas, en nuestro bregar analizando y proponiendo y exhortando a encarar los defectos de nuestra sociedad para construir un socialismo cada día mejor, más pleno y democrático. Eso, a veces, resulta ser más azaroso de lo que pudiera parecer, especialmente cuando se choca y critica inevitablemente a la burocracia y la corrupción. Aunque no se haga sino seguir la convocatoria del general en jefe, Raúl Castro.

Poco tiempo después, a otra persona que conocimos brevemente, la trataron con similar desconsideración. Este es un académico estadounidense que estaba en sus investigaciones sobre ciertos fenómenos de la internet, y que vino a Cuba para entrevistarse con los blogueros que pudiera encontrar, fueran de derecha, izquierda, de alante o de atrás. Lo recriminaron particularmente por venir como turista en vez de pedir permiso como investigador. A mí me parece hasta irónico, teniendo en cuenta la cantidad de extranjeros que vienen como científicos a eventos, cursos, conferencias y esas cosas, y dedican mucho tiempo a investigar las propiedades gustativas de nuestro ron -muy buenas, sin duda-; la meteorología y el clima en Varadero, Cayo Coco y otros balnearios; y la antropología en nuestros y nuestras compatriotas dotados por la naturaleza con generosas condiciones físicas para mostrar la más íntima hospitalidad al visitante extranjero. Me recuerda también un estandarte que se ha enarbolado mucho, que es que cuando vengan muchos turistas, especialmente norteamericanos, ello es muy bueno y maravilloso, incluso mientras más en contacto entren con nuestro pueblo para que vean cómo somos y cuán plenamente vivimos la libertad de construir nuestra sociedad de manera independiente y soberana. Y que en el carril 2 de la Ley Torricelli, el de favorecer los contactos pueblo a pueblo, iba a salirles el tiro por la culata a los imperialistas, porque se iba a revelar allá esta realidad que hoy pueden darse el lujo de distorsionar mediante el monopolio de los medios de información. Bueno, para este compañero estadounidense que trajo una grabadora como herramienta básica de trabajo, eso no se cumplió, y ahora las va a tener difícil para regresar a nuestro hermoso archipiélago.

Una cosa que tuvo en común ambos incidentes, es que las personas que intentaron proyectarse intimidatoriamente sobre nuestros compañeros, parecían muy orgullosos de saber detalles muy precisos de lo que decimos y pensamos. Y según parece, nosotros debíamos sentirnos preocupados porque ellos “tienen ojos y oídos en todas partes”.

Pero señor.

Es mi sentir, y creo también que el de la mayoría de mis compañeros, que no tenemos nada que ocultar. Divulgamos todo lo que se produce en nuestros encuentros. Si hay alguien con complejo de Gran Hermano, tal vez lo más cómodo para esa persona sería mandarnos una dirección de correos, y tendríamos mucho gusto en enviarle las minutas -aunque seamos un poco descuidados al facturarlas, eso sí. Si quiere, que venga abiertamente cuando tengamos una reunión -tampoco son secretas. Nos alegrará que participe en nuestros debates, escuchar sus criterios y que, por su parte, escuche los nuestros. Con seguridad, ellos son de los que más se beneficiarán de participar en estas elucubraciones.

Qué diferencia con otras situaciones, ¿eh?

Ya es evidente, por ejemplo, que nunca nos enteraremos oficialmente de quiénes fueron los que se sentaron a cocinar la propuesta de Lineamientos para el Congreso del Partido. Que nunca sabremos la composición final de los delegados a dicho cónclave. Que nunca sabremos los resultados generales de las campañas que efectúa la Contraloría General de la República -conste, que somos fans de esta última. Que parece que solo nos enteraremos fragmentariamente del sentido y los componentes de un cierto plan quinquenal en el que está insertado el gobierno o el Estado cubano -o el Partido, o cualquier combinación de los tres- para llevar los asuntos públicos de nuestro país, plan que empezó en este 2011 según anuncios del General en Jefe. Que no nos enteraremos que van a cerrar o a abrir más centrales azucareros hasta el día que baje la orden terminante. Que nunca nos enteraremos de cómo se evalúa la actuación de cada ministro, excepto en los casos muy sonados en que estallan escándalos de corrupción que terminan con el sujeto en la cárcel. Que no sabremos cómo se toman las decisiones de cuáles trabajadores o deportistas pueden ser autorizados a trabajar afuera y cuáles no, entre otros muchos ejemplos de cuestiones que un ciudadano o ciudadana, elemento celular del organismo social, podría sentirse empoderado para conocer.

Qué bonito sería que todos los componentes de este conjunto pudiéramos enarbolar el orgullo de andar “con el alma en cueros”.

1 de mayo de 2011

El problema de la natalidad y mi universo paralelo.

El otro día discutíamos el archirepetido tema del problema de la natalidad en nuestro país, y yo repetí mi tesis de que la solución más práctica era la elevación de la productividad del trabajo. Tengo un socio que pretende que no, que lo que hace falta es poner más posadas en La Habana y otras ciudades del país, pero esa solución no es seria y la mía, sí. Entonces, como la cosa es importante, voy a desarrollar mi argumento.

¿Cuál es el problema de la baja natalidad? Que pronto van a ser pocas personas en edad laboral produciendo para mantener a muchos viejitos. Bueno, vamos a meterle mano.

Lo primero es notar que aún siendo hoy muchas personas en edad laboral, no se produce mucho. Si disminuye la población laboral, amenaza el desastre. Pero tomemos en cuenta la eficiencia. La productividad individual impone registros Guinnes a la baja. Cuando disminuya la cantidad de gente, si aumentara la productividad, el total producido podría mantenerse.

Para aumentar la productividad individual hay un remedio muy simple -cuando usted tiene una situación tan mal manejada como la nuestra, donde se gana el mismo salario ya produzcas mucho o poco: pagarle a la gente proporcionalmente al resultado. Ipso facto aumenta la producción y la satisfacción de la gente que pueda ganar un poquito más.

Pero resulta que el gobierno plantea que no tiene recursos para pagar ese poquito más. No está muy claro si el gobierno o cuatro burócratas que disimulan su ineptitud con el bloqueo, pero ese no es el punto. Vamos a tomar ese problema como la oportunidad de resolver más problemas. Como el de las plantillas infladas.

Cogemos al ministerio de la construcción como base material de estudio. Se sabe que el MICONS tiene más custodios que albañiles. Y dirigentes y funcionarios, ni se diga. Veamos qué sucedería en cierto Universo paralelo, que parta de la misma situación inicial de ejemplo.

Tenemos, el día cero, un grupo de cien trabajadores del MICONS en nuestro Universo paralelo. Cuarenta albañiles, cincuenta custodios, diez dirigentes. Si alguien piensa que son muy pocos dirigentes, que suba el número a placer. La baja natalidad provocará que en 10 años, queden 30 albañiles, cuarenta custodios y... bueno, los mismos diez del tercer grupo. Problemas habría con la producción. Pero no si pagamos a los albañiles de acuerdo a los resultados. ¿No hay dinero?, fácil, rebaja de los salarios a la mitad a los custodios. Tengo un pariente, mi sangre, que trabajaba en lo de Sepsa, pero ya pidió la baja así que no se va a molestar conmigo. El dinero ahorrado con el recorte lo distribuyo de la manera que dijimos. Los 30 albañiles, a los 10 años, van a producir por los 40 de antes.

Pasan otros diez años y llegamos a veinte. Quedarían 25 albañiles, 35 custodios, 10 dirigentes. Pero desestimulados por el bajo salario y buscando ganar más, 5 custodios se vuelven albañiles. Tenemos de nuevo 30 albañiles trabajando por 40, y el dinero necesario para sus salarios. Pero además puedo disponer de los sueldos de los custodios que han renunciado, con lo que incremento el estímulo a los albañiles y, con ello, la productividad. Ya producen como si fueran 50.

Pasan otros 10 años y llegamos a los 30 de empezada la experiencia. Quedan por decrecimiento generacional, 25 albañiles, 25 custodios (¡ya está parejo¡) y diez dirigentes. Motivados porque el cemento, la arena et al representan su medio de vida, y uno bueno, a los albañiles no hay quien les robe un solo saco. Se saca la cuenta de que se puede botar 10 custodios y repartirse los salarios proporcionalmente al trabajo. Por aumento de la productividad, los 25 albañiles están haciendo el trabajo que antes hacían los 40. Algún custodio de los racionalizados puede convertirse en albañil, pero esa no va a ser la próxima cantera. No puede aumentar más la productividad individual, por el atraso de las fuerzas productivas, falta de herramientas y maquinarias modernas. Ahora se va a vincular el salario de los dirigentes con la productividad. Para esto sí va a haber recursos, no se preocupen. Resulta un paso necesario porque estos últimos son los que pueden autorizar la compra de esta maquinaria. Los veinti-pico de albañiles van a producir ahora por 50, esto es más que cuando empezamos.

En todo esto no hemos tenido en cuenta que con un país menos poblado, hace falta construir y reparar menos casas, pero la capacidad extra se puede invertir en infraestructura de desarrollo científico-técnico. Cuarenta años más tarde, llega el momento que los constructores hacen sus máquinas herramientas electrónicas y robotizadas. Quedan 15 hombres a pie de obra, pero se produce por 60.

En este momento estaremos tan cerca de haber construido el comunismo, que podemos botar a los 10 funcionarios, que estos sí que no habrán disminuido. Liberados de las trabas y papeleos y burocratismos, los hombres y organismos cibernéticos producen más que 80 personas en los tiempos bárbaros y atrasados que dejamos cincuenta años atrás.

A los 60 años de iniciada la experiencia, no hay presión demográfica sobre la producción. Las personas se dedican al trabajo intelectual, al arte, el deporte y esas cosas. Los robots hacen el trabajo duro. Lo de la reproducción deja de ser una preocupación y es asumido como una realización para las personas que gustan de esas cosas, ya para cuando hayan cumplido sus 40 años -el adelanto de la medicina hará que no sea un problema- o cuando les de la gana.

Todo eso está por suceder en mi universo paralelo.